A medida que el Gobierno de EEUU afloja las normas ambientales, los estados invierten más en eficiencia energética y designa mayores ahorros de energía. Así se desprende de la duodécima edición del Cuadro de Mando de Eficiencia Energética del Estado del American Council for an Energy-Efficient Economy ( ACEEE, por sus siglas en inglés), donde se informa sobre el progreso de las políticas y programas estatales de eficiencia energética. Los líderes del ranking son Massachusetts y California.
El informe identifica comos líderes a Massachusetts y California; entre los estados que más han mejorado se encuentra Nueva Jersey. En cambio, Iowa es uno de los estados que perdió posiciones durante el pasado ejercicio. Los últimos de la fila en esta ocasión han sido Dakota del Norte, Virginia Occidental y Wyoming.
El liderazgo de Massachusetts
Massachusetts volvió a liderar el ranking el pasado año gracias a un plan para establecer nuevos objetivos de ahorro de energía para tres años y la aprobación del gasto en servicios públicos para la modernización a escala de la red. Le siguió California, que lideró los esfuerzos de eficiencia en edificios, transporte y electrodomésticos. A estos líderes les siguen Rhode Island, Vermont, Connecticut, Nueva York, Oregon, Minnesota, Washington y Maryland.
El Gobernador de Massachusetts, Charlie Baker, se mostró «orgulloso» de que el Estado lidere en eficiencia energética por octavo año consecutivo, y se comprometió a «continuar adoptando y buscando medidas que brinden miles de millones de dólares en ahorros a nuestros residentes y negocios cada año». «Massachusetts mantiene su compromiso de aprovechar la eficiencia energética y la energía limpia para cumplir los objetivos climáticos, reducir los costos y hacer crecer la economía de la comunidad», concluyó.
Aumenta la inversión
Los estados aumentaron las inversiones en eficiencia energética en los servicios públicos. Así, durante 2017 invirtieron unos 8.000 millones de dólares, frente a los 7.600 millones en 2016. El resultado fue neto: un aumento del 7,3% en ahorros de electricidad (casi 26,5 millones de MW/h), cantidad suficiente para abastecer a unos 2,5 millones de hogares estadounidenses al año.
Algunos estados se unieron al impulso de la construcción de edificios de energía nula, sobre todo a través de códigos de construcción más estrictos, según el estudio. Es el caso de California, donde se exige que las casas nuevas y edificios comerciales consuman tanta energía como producen para 2020 y 2030, respectivamente. Vermont, Rhode Island, Oregon, Washington, el Distrito de Columbia y Massachusetts han incorporado también la construcción de edificios de energía nula en sus planes a largo plazo.
Respecto a las soluciones innovadoras en financiamiento, seis estados (California, Nueva York, Connecticut, Hawai, Nevada y Rhode Island) establecieron bancos verdes, y Washington, DC, aprobó una legislación para hacer lo mismo.