Acelerar la transición hacia un sistema energético bajo en carbono podría ser una solución a largo plazo para reducir los precios de la energía, según señala el Group of Chief Scientific Advisors (GCSA) de la Comisión Europea (CE) en un comunicado publicado el 20 de octubre.
En un contexto en el que los precios de la energía han aumentado sustancialmente en los últimos meses en Europa, los asesores del GCSA de la Comisión Europea han emitido una declaración que destaca la necesidad de avanzar en materia de transición energética para mitigar la crisis climática y proteger a la población vulnerable de sufrir pobreza energética.
Este comunicado se ha publicado en respuesta a la petición del vicepresidente de Relaciones Interinstitucionales y Previsión de la Comisión, Maroš Šefčovič, en relación con la reciente comunicación de la CE sobre los precios de la energía, que incluye un conjunto de herramientas para abordar su impacto inmediato y mejorar la resiliencia frente a futuros desafíos. En este sentido, los asesores apoyan la propuesta de invertir los ingresos del impuesto al carbono en abordar la pobreza energética, impulsar la innovación y crear empleo.
El comunicado se basa en el ‘Enfoque sistémico para la transición energética en Europa’ del Group of Chief Scientific Advisors y en el ‘Informe de revisión de pruebas’ de SAPEA. El grupo de expertos GCSA, junto con el consorcio de redes de academias europeas SAPEA, forman el mecanismo de asesoramiento científico, un servicio creado por la Comisión Europea para proporcionar asesoramiento científico independiente a los comisarios de la UE con el objetivo de facilitar la toma de decisiones.
Energía aseguible, sostenible y renovable
«Dado que los altos precios de la energía amenazan a millones de europeos en riesgo de pobreza energética, lograr una alta proporción de energía asequible, sostenible y renovable es más importante y urgente que nunca», apunta Nebojsa Nakicenovic, vicepresidente del Group of Chief Scientific Advisors y asesor principal del comunicado.
Para avanzar hacia la transición energética, los expertos del GCSA señalan en la declaración que Europa debe poner a las personas en el centro de las políticas energéticas y unir al conjunto de la sociedad hacia este objetivo común.
Asimismo, indican que frente a los altos precios de la energía es necesario un apoyo inmediato a las viviendas en riesgo de pobreza energética, así como inversiones para aumentar el porcentaje de producción de energía baja en carbono a largo plazo.