En 2021 en España se instalaron 1.203 MW de nueva potencia fotovoltaica en instalaciones de autoconsumo, un 101,84% más con respecto a 2020, cuando se pusieron en marcha 596 MW. Así se desprende de los últimos datos ofrecidos por la Unión Española Fotovoltaica (UNEF).
Por sectores, ha sido el residencial el que más ha apostado por el autoconsumo energético. En concreto, de los 1.203 MW instalados, el 32% ha sido en el ámbito doméstico. En el sector industrial se ha instalado un 41% de esta nueva potencia, un 15% menos que el año anterior, aunque se espera que la tendencia alcista se recupere cuando se vayan ejecutando los proyectos parados a la espera de recibir las ayudas del Plan de Recuperación de los fondos europeos Next Generation.
En el sector comercial se ha instalado un 26%, lo que supone un incremento del 3% respecto a 2020. Por último, tan solo un 1% pertenece a instalaciones aisladas de la red.
Tras observar la progresión de los últimos años, UNEF prevé que esta tendencia creciente se mantendrá. Desde la eliminación del llamado impuesto al sol en el año 2018, el incremento de este tipo de energía renovable ha sido exponencial: en el año 2019 obtuvo 459 MW de potencia; en el 2020, 596 MW; y 1.203 MW en 2021.
Razones del crecimiento del autoconsumo residencial
Las instalaciones fotovoltaicas para autoconsumo en viviendas prácticamente se han duplicado. UNEF destaca que las nuevas regulaciones que facilitan la inversión en esta energía y el elevado precio de la electricidad anima, cada vez a más particulares, a apostar por ella. Además, se están poniendo en funcionamiento proyectos de autoconsumo colectivo que impulsa aún más a este sector.
Por su parte, los incentivos locales y la eliminación de muchas barreras administrativas han provocado que muchos particulares se conviertan en auto consumidores. UNEF aboga por la simplificación administrativa que facilite el autoconsumo y ha logrado que 14 comunidades autónomas hayan eliminado la exigencia de licencia de obra para las instalaciones sobre los tejados.