Hasta el 29 de julio la Comisión Europea estará recopilando comentarios sobre una nueva etiqueta energética para radiadores de baja temperatura, diseñados para minimizar el consumo de energía y garantizar una calefacción óptima. Esta convocatoria (call for evidence) forma parte de la preparación de un posible reglamento delegado para desarrollar dicha etiqueta energética, con el objetivo de finalizar estas normas para finales de 2026.
Esta iniciativa busca desarrollar una etiqueta energética para impulsar la adopción generalizada de los radiadores de baja temperatura con el fin de aumentar la eficiencia energética y reducir el impacto ambiental de los sistemas de calefacción. Estos aparatos desempeñan un papel fundamental en la implantación de bombas de calor.
Etiqueta energética para radiadores de baja temperatura
Los radiadores de baja temperatura están diseñados para suministrar más calor desde un radiador del mismo tamaño a baja temperatura del agua, generalmente gracias a su convección forzada. Esto hace que las bombas de calor sean mucho más eficientes, reduciendo su consumo energético a la mitad o más si se sustituyen todos los radiadores antiguos por otros de tamaño equivalente. Su uso con calderas de gas de condensación ofrece importantes mejoras de eficiencia (5% o más), mientras que las bombas de calor híbridas también ofrecen mejoras intermedias (entre el 5% y el 50%, dependiendo del tamaño de la bomba de calor y la caldera).
La etiqueta energética de los radiadores de baja temperatura tendrá como objetivo mostrar la información necesaria para permitir a los consumidores comparar diferentes radiadores y permitir a los instaladores proponer los radiadores de baja temperatura adecuados a los clientes.
La convocatoria para desarrollar dicha etiqueta energética está abierta a comentarios hasta el 29 de julio. Las aportaciones se tendrán en cuenta para la preparación de un posible reglamento delegado, con el objetivo de su adopción final en el cuarto trimestre de 2026.