Bosch Termotecnia participa en un curso de Instalaciones Térmicas de Edificios para su Rehabilitación Energética.

Los edificios de viviendas, en los que pasamos gran parte de nuestra vida, deben ofrecer unas condiciones mínimas de confortabilidad, tanto en luminosidad, humedad o temperatura. El confort térmico depende de numerosos factores, entre los que se encuentran los de tipo personal y los ambientales. De lo que no cabe duda es que para conseguir un determinado nivel de confort térmico se dispone de dos conjuntos de medidas: las pasivas (envolvente térmica del edificio) y las activas (instalaciones de calefacción y refrigeración).

Bajo estas premisas, Bosch Termotecnia participó en un curso sobre Instalaciones Térmicas de Edificios para su Rehabilitación Energética, mediante una charla ofrecida por Ralph Thümen, ingeniero del departamento de información y apoyo técnico de Bosch y Buderus, en la que abordó los principios técnicos de la condensación y cogeneración a pequeña escala, así como los aspectos evolutivos y técnicos de la generación simultánea de calor y electricidad (cogeneración) y como ésta se ha extendido en la práctica como método para mejorar el aprovechamiento de la energía contenida en los combustibles. La oferta actual de Buderus en calderas de condensación y sistemas de cogeneración bajo la marca Bosch presenta soluciones adaptadas a las necesidades de cualquier edificio en proceso de rehabilitación.

El curso, de cinco días de duración, que se celebró entre el 22 y el 29 de abril en la fundación de Energía de la Comunidad de Madrid, estaba organizado por la Dirección General de Industria Energía y Minas y dirigido, principalmente, a profesionales del sector de la rehabilitación, reformas de edificios y técnicos en eficienciaenergética. En el mismo, se ofrecieron soluciones a los aspectos relativos a los gastos en calefacción, cuyo importe representa habitualmente más del 40% de la factura energética, razón por la cual, cuando se plantea una rehabilitaciónenergética de un edificio se contemple la sustitución de las antiguas calderas centralizadas por otras más eficientes que pueden funcionar con combustibles alternativos más baratos y menos contaminantes.

Además, las instalaciones térmicas, con las que se produce el agua caliente sanitaria y el agua para la calefacción, son sistemas que integran, no sólo las calderas, sino incluso las redes de distribución y los emisores. Todo ello, aconseja que los proyectos de reformas incluyan un conjunto de mejoras para conseguir los rendimientos previstos, así como la implantación de los dispositivos de medición y reparto de gastos individualizados.

 
 
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