La eficiencia en la iluminación, clave en la creación de las ciudades

En el marco de Smart City World Congres, celebrado en Barcelona, se pone de manifiesto la importancia de la iluminación inteligente y eficiente como claves para crear las ciudades del futuro. En una mesa redonda de ciudades, organizada por Philips, se ha puesto en alza la labor de algunas ciudades españolas que ya están optando por la renovación tecnológica de las instalaciones de iluminación, como es el caso de Terrassa, Barcelona o el Cabildo de la Palma.

Estas ciudades, a través de planes a medio y largo plazo de eficiencia energética, obtienen ahorros importantes en el alumbrado público y liberan recursos que pueden ser empleados a otros fines.

La iluminación también juega un papel importante en el campo del embellecimiento de las ciudades. Alumbrar el patrimonio histórico-artístico de las urbes cumple una función cohesionadora de los vecinos con su ciudad, un mayor orgullo de pertenencia a la misma y un reclamo turístico para los visitantes, con los ingresos derivados de los mismos. Ciudades como Córdoba o Valladolid ya apuestan por la luz para poner en valor su rico patrimonio, sin olvidar la eficiencia energética.

La inteligencia llega también a las instalaciones hasta el punto de poder ser controlada por una aplicación de Smartphone o Tablet. Controlar el alumbrado de una calle, un barrio, un edificio o la ciudad completa es posible gracias a sistemas como CityTouch de Philips. Gracias a este sistema de gestión integral del alumbrado, se puede ofrecer luz cuándo, dónde y cómo se necesita, adaptándola a eventos especiales o al día a día de la ciudad. En la actualidad, menos del 2% de las luminarias instaladas en nuestras calles es inteligente.

Las ciudades toman relevancia en el mundo presente y futuro. Vivimos un rápido proceso de urbanización que llevará a que dos de cada tres personas en el mundo vivan en grandes urbes en 2050. Este proceso conlleva la necesidad de mayor uso de recursos, entre ellos de energía – se prevé un incremento del uso de energía del 30% en 2030. Si sumamos que la sociedad está viviendo un cambio donde lo inteligente y la conectividad son básicos, las ciudades del futuro tienen que satisfacer estas necesidades. Por tanto, el mundo necesitará más luz. Y esta luz tiene que ser más eficiente e inteligente.

Si tenemos en cuenta que el 19% del consumo energético mundial es en iluminación, cifra que asciende al 20% en el caso de las ciudades y al 35% en el caso de los edificios, las oportunidades de ahorro que ofrecen las nuevas tecnologías en iluminación, como los LED y los sistemas de gestión y control, son una solución real. La combinación de estas tecnologías conlleva ahorros energéticos de más del 80%, con el consiguiente ahorro económico.

La colaboración público-privada base de futuro de las ciudades

Philips pretende influir positivamente en la vida de 3.000 millones de personas en 2025 a través de innovaciones tecnológicas. El campo de la iluminación jugará un papel crucial en este propósito. La innovación, para que sea realmente significativa, tiene que surgir de la colaboración entre todos los agentes implicados. Entes públicos y privados deben aunar esfuerzos y trabajo con la finalidad de buscar y desarrollar las innovaciones más relevantes para las personas.

La realidad económica de las ciudades en la actualidad es también un hándicap para la renovación del alumbrado, pero gracias a los ahorros obtenidos con las nuevas tecnologías de iluminación, se puede financiar la nueva instalación a través de modelos ESE y fondos europeos. Dentro de las políticas de cohesión de la Unión Europea, que dotará a este fin de 336.000 millones en el periodo 2014-2020, cada estado miembro debe destinar un 5% como mínimo al desarrollo urbano y entre un 10% y un 20% a eficiencia energética. La colaboración público-privada se plantea como una solución actual para llevar a cabo estos proyectos.

 
 
Patrocinio Plata
Patrocinio Bronce
Salir de la versión móvil