IKEA cambia toda su gama de iluminación a sistemas LED a partir de septiembre de 2015 con el fin de impulsar la vida sostenible en el hogar y el ahorro de energía, ya que la fuente de luz LED utiliza un 85% menos de energía y puede durar hasta 20 años.
Además, las bombillas tienen variedad de formas y tamaños que permiten nuevas soluciones de diseño que no habrían sido posibles con bombillas incandescentes, lo que permite que la iluminación pueda ubicarse en el interior del mobiliario. Así, una casa con un promedio de 10 focos sera capaz de combatir los crecientes precios de la energía por el ahorro de casi 400 euros en su factura anual.
El Jefe de la Oficina de Sostenibilidad de Ikea, Steve Howard, apunta que al cambiar a LED a nuestros clientes utilizará hasta un 85 por ciento menos de energía que no sólo reducir su huella de carbono, sino que también les ayudará a combatir los crecientes precios de la energía.
Estas medidas se enmarcan en la estrategia ‘People & Planet Positive’ de Ikea con la que se pretende influir positivamente en el planeta, economizando recursos y ayudando a mejorar el día a día de sus clientes.