Honeywell ha incorporado a su gama de productos Lyric, el nuevo detector Wi-Fi de fugas y congelación Lyric W1. El dispositivo proporciona a los propietarios de viviendas una solución sencilla y fácil de instalar para detectar altos índices de humedad, fugas de agua y congelación en la instalación de tuberías de la casa, además ofrece diversas funciones como Bluetooth y WiFi y una duración de hasta 3 años gracias a su batería AA.
Las fugas de agua, roturas y averías en la red de abastecimiento suponen una de las principales razones de siniestros en los hogares españoles, causando pérdidas del 15,2% del agua suministrada, tal y como revela la «Encuesta sobre el suministro y saneamiento del agua 2016» elaborada por el INE, y provocando reparaciones que pueden superar los 400 euros.
El tiempo y las condiciones climáticas pueden producir la corrosión de las tuberías derivando en pequeñas fugas, contaminando el agua o dificultando el flujo a través del sistema. El detector Wi-Fi de fugas de agua Lyric W1 permite detectar estos potenciales daños evitando una costosa reparación.
Detección de daños potencialmente costosos
Gracias a su alarma de 100 decibelios, el dispositivo advierte a los propietarios de las posibles fugas de agua o de congelación cuando se encuentran en casa. Esta misma alarma se notifica a través de la App Lyric, lo que permite a los usuarios responder a cualquier incidencia que se produzca en su hogar con la mayor brevedad posible, incluso cuando no están en la vivienda.
El Lyric W1 supone una garantía para el hogar ya que facilita la detección de las posibles fugas, grietas y humedades que se produzcan. El detector se suministra con un cable sensible al agua de 1,2 metros, que se puede colocar alrededor de tuberías y zonas que puedan suponer un riesgo potencial de fuga. Su instalación se puede realizar en cualquier zona del hogar, ya sea en el suelo o en la pared.