En septiembre de 2016 la cadena de supermercados LIDL inauguró su primera ecotienda de España. Sistemas de gestión eficiente de recursos, instalación fotovoltaica para autoconsumo y aparcamiento para vehículos y bicicletas eléctricas, entre otras medidas de eficiencia energética, convierten a este supermercado de Coslada (Madrid) en el más sostenible del país.
Diseñado y construido bajo exigentes criterios de sostenibilidad, la nueva tienda LIDL ha obtenido las certificaciones BREEAM y VERDE.
En las mismas fechas que abría sus puertas la ecotienda de Coslada, a pocos kilómetros de allí, en Alcalá de Henares, LIDL inauguraba su décima plataforma logística en España, considerada la más grande, sostenible y avanzada tecnológicamente de cuantas la cadena tiene en Europa.
Iluminación LED y aparcamiento de empleados con estaciones de recarga de vehículos eléctricos alimentadas con energía limpia procedente de instalaciones fotovoltaicas en el propio almacén, además de otros criterios ecosostenibles, han permitido que el centro logístico de la ciudad complutense también obtenga las certificaciones BREEAM y VERDE, además de la DGNB.
La tienda total
Los nuevos centros de Coslada y Alcalá de Henares no son casos aislados. La compañía lleva años mostrando su preocupación por el medio ambiente y ha puesto todo su empeño en concienciar a sus trabajadores a la hora de establecer y llevar a cabo dinámicas que permitan el ahorro energético.
A lo largo de estas dos últimas décadas, Lidl ha ido adaptando su modelo de negocio original al perfil del consumidor español, sin perder de vista la esencia de su filosofía discount. El nuevo diseño de tienda es un buen ejemplo: en ella se conjugan los elementos del discount (eficiente, funcional y productiva) con un enfoque al cliente (cómoda, luminosa, moderna, cercana, etc.), todo ello diseñado y construido desde la óptica de la sostenibilidad, tanto medioambientalmente como de personas. Es lo que LIDL llama «tienda total».
Todas las tiendas de esta cuarta generación incorporan elementos de sostenibilidad: materiales de última generación, iluminación LED, gases refrigerantes naturales de baja contaminación, etc.
Fruto de ese esfuerzo, la cadena de supermercados ha obtenido la certificación ISO 50001 para el sistema de gestión energética implantado en todas sus instalaciones en España, y con el que se prevé un ahorro de 65.000 MWh en los próximos tres años.
Coslada, paradigma de ecotienda
El recién inaugurado supermercado LIDL de Coslada pertenece a esa nueva generación de tiendas cómodas y funcionales donde prima la responsabilidad medioambiental, en línea con un nuevo consumidor más concienciado con el respeto por el planeta.
Como paradigma de esa nueva generación de tiendas, el centro de Coslada dispone de medidas de ahorro y conservación de recursos energéticos que abarcan desde los propios materiales de construcción, hasta el modo en el que se consume la energía en las instalaciones de iluminación, climatización, electricidad y agua.
Además de los elementos de sostenibilidad que LIDL establece en su modelo de ecotienda, en el nuevo centro de Coslada se han incluido numerosas medidas de sostenibilidad adicionales que, según indica la compañía, han de servir como piloto para evaluar su implantación en el resto de tiendas de Lidl en España.
En la tienda de Coslada se recoge el agua de lluvia mediante un depósito de 16 m3 que se utiliza posteriormente como recurso para las cisternas de los inodoros y el riego de las zonas verdes de los alrededores. Además, se han instalado 645 módulos fotovoltaicos, que corresponden a una producción anual de energía de 145.000 kWh, equivalente al consumo de 42 viviendas familiares.
En el aparcamiento del establecimiento se ha instalado una estación piloto de recarga de vehículos eléctricos que puede dar servicio de forma simultánea a cuatro automóviles y un punto adicional de recarga para bicicletas eléctricas.
Illuminación
Como en el resto de tiendas de LIDL, se han instalado luces LED que ayudan a reducir el consumo eléctrico. Esto se traduce en una reducción de los costes y de las emisiones en casi la mitad (40%-50%).
Para el uso eficiente de la energía y los recursos, LIDL diseña sus nuevas tiendas pensando en el aprovechamiento de la luz diurna y con un control de iluminación automático. Además, las zonas de personal también cuentan con luz natural gracias a los ventanales horizontales en fachada.
Climatización
Para la climatización, uno de los elementos que más energía consume, la ecotienda dispone de un software que controla y vigila la ventilación en función del grado de ocupación en cada momento del día. A través de una sonda de CO2, se ajusta el volumen de aire que se renueva a las necesidades de cada espacio, lo que supone un ahorro energético del 6%.
El sistema de climatización también cuenta con ventiladores plug fan cuya velocidad de giro se ajusta automáticamente a las necesidades de cada momento. El ahorro energético que se obtiene con este medida es de un 40%.
Un sistema free cooling aprovecha la temperatura del aire exterior para reducir el consumo energético un 27%.
Por último, un sistema de recuperación de calor en los sistemas de ventilación de dependencias y almacén reduce notablemente las necesidades de consumo energético en el supermercado.
Energía fotovoltaica
Tan importante como las medidas de ahorro en las instalaciones que consumen energía es la implantación de energías renovables. De ahí que LIDL apueste por plantas solares fotovoltacias en las cubiertas de sus centros.
La tienda de Coslada cuenta con 645 módulos fotovoltaicos que tienen una capacidad de generación eléctrica de 145.000 kWh al año, el 30% de la energía que requiere para su funcionamiento.
Las tiendas del mañana
Todas estas medidas de ahorro energético y aprovechamiento respetuoso de los recursos son mucho más eficientes si las tiendas han sido diseñadas con criterios de construcción sostenible.
Para LIDL la eficiencia energética comienza con el diseño de cada nueva tienda. De ahí que la compañía invierta esfuerzos en utilizar materiales de alta calidad con propiedades aislantes óptimas.
En todas las nuevas aperturas, LIDL realiza ensayos a la estanqueidad del aire (Blower Door Test), que garantizan una correcta ejecución de la envolvente y, en consecuencia, optimizan el consumo energético.
La ecotienda de LIDL en Coslada es, en resumen, el ejemplo de los esfuerzos que las grandes compañías pueden hacer por el medio ambiente. Una muestra más de que el confort de clientes y empleados no está reñido con la eficiencia energética y que el progreso puede convivir con la sostenibilidad.