La solución SCULPline de Schréder ha sido la elegida para iluminar la Catedral de Amberes. Se trata de un proyector lineal que ayuda al ahorro energético y se mezcla discretamente con las fachadas para conseguir un impacto visual mínimo. Los reflectores están integrados directamente en la fachada, sin ningún daño a los materiales históricos, reemplazando los viejos accesorios instalados a una distancia de la Catedral.
La nueva instalación ofrece un control más preciso de la luz. Al estar tan cerca de la arquitectura, los reflectores enfatizan los detalles arquitectónicos, que fueron arrastrados por la luz amarilla del viejo sistema de iluminación, como una lupa y bañan el edificio en luz blanca.
Ahorro energético para la ciudad
Debido a su motor fotométrico LensoFlex®2 de rendimiento, SCULPline permitirá a la ciudad ahorrar energía. Y es que los reflectores consumen un 50% menos de energía que los accesorios antiguos. Además del reducido consumo de la solución de iluminación, los proyectores también reducirán significativamente los costos de mantenimiento debido a su larga vida útil.
Este proyecto comenzó el pasado mes de septiembre, cuando la ciudad de Amberes reveló un nuevo esquema de iluminación para la icónica Catedral de Nuestra Señora para celebrar el aniversario número 500 de la torre de la Catedral. La ciudad quería resaltar la arquitectura de la Catedral con una solución de iluminación energéticamente eficiente.