El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco) ha resuelto el concurso del nudo de transición justa de La Pereda 220 kV con el fin de otorgar los derechos de acceso a la red eléctrica a proyectos renovables que contribuyan a impulsar la actividad económica y el empleo en la zona de transición justa del Valle del Caudal. Así, ha adjudicado 50 MW a Hunosa para su proyecto de transformación de la central térmica de La Pereda (Asturias) en una central de biomasa.
El concurso, impulsado por el Instituto para la Transición Justa (ITJ), ha seguido un procedimiento de concurrencia competitiva que prioriza aquellos proyectos que, minimizando la afección ambiental, maximizan los beneficios socioeconómicos locales para la zona de transición justa, compuesta por los municipios de Aller, Lena, Mieres, Morcín, Quirós, Ribera de Arriba, Riosa y Teverga. La resolución puede consultarse en este enlace.
Este concurso se suma a otros instrumentos de apoyo ya desplegados desde 2019 para las zonas de transición justa y mineras de Asturias por parte del Miteco. En total, ha concedido 714 millones de euros en ayudas a 385 proyectos en las zonas de transición justa y mineras de Asturias.
Transformación de la central térmica de La Pereda
Con esta adjudicación de 50 MW al proyecto de transformación de la central térmica de La Pereda a biomasa, Hunosa se compromete a impartir programas de formación profesional para 2.169 residentes de la zona de transición de justa, con un total de 37.254 horas de formación. Igualmente, instalará 6.050 kW de autoconsumo para viviendas y edificios municipales, en forma de redes de calor y autoconsumo eléctrico.
Asimismo, se compromete a invertir en la cadena de valor de Asturias más de 41 millones de euros para el desarrollo de la central de biomasa, así como invertir casi 2,4 millones en actividades de economía circular y conservación, restauración y promoción de la biodiversidad y ecosistemas.
Además, se compromete a crear y mantener un total de 1.565 empleos equivalentes a tiempo completo anualizados (ETC) a lo largo de, al menos, seis años. Esto supone una media de mantenimiento de 260 empleos en cada uno de los ejercicios, mediante la operación de la central, la creación de nuevos empleos en el sector forestal y la materialización de inversiones para apoyar a proyectos empresariales en la cuenca. Hunosa también colaborará con la Universidad de Oviedo en actividades de I+D+i y ordenación forestal, y continuará impulsando actividades de economía circular en sus instalaciones de Batán Recovery.
La adjudicataria ha depositado una garantía de 6 millones de euros para asegurar el cumplimiento de estos compromisos socioeconómicos, para lo cual dispone de un plazo de seis años, es decir, hasta un año después de la fecha límite para la obtención de la autorización administrativa de explotación definitiva, tras el cual el ITJ verificará su cumplimiento.