El Ayuntamiento de Cádiz emprende esta semana una serie de visitas a los centros de enseñanza pública para asegurar el cierre energético de aquellos edificios en los que no se desarrolla ninguna actividad en verano. El objetivo de esta actuación es doble, favorecer la reducción del consumo energético durante las vacaciones e identificar posibles mejoras energéticas.
El Consistorio gaditano dispone desde 2017 de una base de datos online donde se reflejan los consumos de agua y de electricidad de cada edificio municipal. A través de esta plataforma se viene observando que numerosos centros, a pesar de cerrar en verano, siguen consumiendo una cantidad considerable de energía.
Por tanto, la Concejalía de Transición Energética se ha propuesto reducir los gastos energéticos innecesarios por una cuestión de gestión económica básica y por evitar el impacto ambiental del derroche energético.
En línea con el Pacto de Alcaldías
Así, la concejala de Enseñanza, Ana Fernández, y responsables de la Concejalía de Transición Energética se reunieron el lunes 12 de julio con la dirección de los centros públicos de la ciudad para coordinar las visitas, que tendrán lugar durante las próximas dos semanas. Previamente, se han remitido a cada colegio los datos de consumo de agua y electricidad de los últimos años, así como el coste de estos suministros.
Estas actuaciones vienen enmarcadas en el Pacto de las Alcaldías por el Clima y la Energía, que ha suscrito el Ayuntamiento de Cádiz, en el cual se compromete a reducir las emisiones de CO2 al menos un 40% para 2030 y aumentar la eficiencia energética al menos un 27%.